Cavé una tumba en el
patio trasero de mi mente
Y enterré el cadáver de
mi credulidad
Yo misma la maté,
con demasiadas preguntas sin contestar
con demasiadas preguntas sin contestar
No quise quemar sus
restos,
por si algún día más
preguntas la quieren resucitar
Algunos le llamarán
vacío espiritual
Yo le llamo intentos de
racionalidad.
No la extraño por
ahora,
Y voy a confesarles, ya
que estamos acá
Que estoy completamente
enamorada
De todos esos interrogantes
que no me dejan en paz.
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